¿QUÉ COLOR DE ESTERILLA DE YOGA DEBO ELEGIR?
Simbolismo, energía y alineación interior.
¿Creías que elegías tu esterilla de yoga únicamente por su comodidad o agarre?
¿Y si su color revelara mucho más?
En este artículo, explora el profundo simbolismo de las tonalidades -desde el relajante azul hasta el vibrante rojo- y descubre cómo cada color puede influir en tu energía, tus emociones y tu alineación interior.
Escrito por TINA - Junio 2025
Contenidos reducibles
Tiempo de lectura
Aproximadamente 10 minutos
LO QUE ESTÁ A PUNTO DE DESCUBRIR
. Cómo el color de tu esterilla de yoga influye sutilmente en tu estado de ánimo y tu conexión a tierra.
. El poder de los colores cálidos (rojo, naranja, amarillo): vitalidad, acción, conexión a tierra.
. Los tonos fríos (azul, verde, violeta): calma, reenfoque, intuición.
. El significado profundo de los tonos blancos, negros y neutros: equilibrio, purificación, interioridad.
. Cómo alinear los chakras, las intenciones y los colores del tapete para una práctica más consciente.
. El poder emocional del color: ¿qué tiene que decir la cromoterapia sobre el yoga?
"¡Vamos a echar un vistazo!

CÓMO EL COLOR DE TU ESTERILLA DE YOGA INFLUYE SUTILMENTE EN TU ESTADO DE ÁNIMO Y EN TU CONEXIÓN A TIERRA
Cuando desenrollas tu alfombra, entras en un espacio sagrado. Un espacio propio. Y el color que elijas para este soporte diario no sólo habla a tus ojos, sino a tu energía más profunda.
Cada color emite una frecuencia vibratoria que influye en tus emociones, tu respiración y tu capacidad de concentración. Por eso, en el yoga, la cromoterapia y las tradiciones ancestrales, no se elige un color al azar. El rojo te conecta con la Tierra, el azul te abre al espacio interior, el verde calma el corazón y el violeta te eleva a lo invisible. Elegir una alfombra no es sólo una elección estética, es un acto consciente.
No es raro que sientas la llamada de un matiz diferente cuando cambias de fase vital, de práctica o de estado emocional. Esto no es un capricho: es un reflejo de tu evolución. El yoga es un camino de transformación, y la esterilla se convierte en un espejo silencioso de ello, testigo de tu respiración, tu equilibrio y tus dudas. De este modo, el color de la esterilla se convierte en un ritual en sí mismo.
En Yogaterrae, cada tono de nuestra colección se concibe como una invocación sensorial y simbólica. Nada se deja al azar: los tonos evocan lugares mediterráneos bañados por la luz, recuerdos de elementos naturales, estados de ánimo.
Elegir una alfombra beige arena o rosa Kioto no tiene la misma resonancia que optar por un azul profundo o un verde salvia. Uno evoca calma, otro ímpetu, un tercero introspección. Y a veces es la simple necesidad de belleza la que guía tu mano.
Practicar con un color que te hable significa honrar la energía del día. Significa darte el derecho a ser múltiple, cambiante y vivo.
Y tú, ¿qué tono haría brillar tu consulta este verano?

COLORES CÁLIDOS: CUANDO TU ESTERILLA DE YOGA SE CONVIERTE EN UNA FUENTE DE VITALIDAD, CORAJE Y ENERGÍA SOLAR
Hay días en los que se siente la necesidad de fuego, de movimiento, de salir de la hibernación interior. Esos son los momentos en los que los colores cálidos nos llaman. Sobre una esterilla de yoga roja, naranja o azafrán, cada respiración se convierte en una invitación a despertar. Estos colores vibran con la frecuencia de la Tierra, el vientre y el corazón palpitante. Aumentan la energía vital, la confianza y la calidez en las relaciones.
El rojo evoca la fuerza primitiva, el anclaje, los cimientos sobre los que se construye todo. Es el color del chakra raíz, Muladhara, donde todo comienza. Favorece las prácticas tónicas, las posturas de pie y las sesiones en las que se reconecta el cuerpo a la gravedad. También es el color de las elecciones comprometidas, de la pasión, del fuego sagrado que te impulsa a perseverar.
El naranja es más fluido. Es la creatividad en movimiento, el aliento del placer. Acompaña las transiciones, las posturas fluidas, las prácticas sensuales y la danza. Se hace eco de Svadhisthana, el chakra sacro, vinculado a la alegría, la sensualidad y el impulso creativo. Una alfombra naranja es una llamada a la espontaneidad, al juego y a la luz.
En cuanto al amarillo, irradia. Es el sol interior, el fuego digestivo, la claridad mental. En yoga, estimula la conciencia del centro, la postura correcta y el discernimiento. En una esterilla amarilla o dorada, cultivamos el resplandor, la autoafirmación y la confianza, en conexión con Manipura, el chakra del plexo solar.
Estos colores son soleados, vivos y generosos. Te envuelven en una energía cálida, estimulante y a veces transformadora. Son ideales para las prácticas matutinas, las estaciones frías o los momentos en los que buscas reavivar tu impulso interior.
Elegir una esterilla de yoga de colores cálidos significa despertar la vitalidad, activar el fuego sagrado del cuerpo y redescubrir la audacia de lanzarse hacia la vida, incluso cuando parece lejana.

COLORES FRÍOS: CALMA, INTUICIÓN Y CLARIDAD EN EL CENTRO DE TU PRÁCTICA
Mientras que los colores cálidos dan energía, los fríos calman, fluidifican y pacifican. Elegir una esterilla de yoga azul, verde o violeta significa que buscas una práctica introspectiva, suave y regeneradora. Estos colores evocan el agua, el aire y el espacio: elementos sutiles que invitan a dejarse llevar y a abrir la conciencia. Son perfectas para el yin yoga, la meditación, el pranayama o las sesiones nocturnas en las que necesitas bajar el ritmo.
El azul profundo o celeste está vinculado al chakra de la garganta, Vishuddha. Favorece la comunicación interior, la verdad y la escucha. Sobre una esterilla azul, cada postura se convierte en un diálogo silencioso entre la respiración y el espacio. El azul nos invita a ralentizar el ritmo para escuchar mejor. Es ideal para quienes buscan calmar la mente, regular las emociones o redescubrir una voz interior clara.
El verde, el color del chakra del corazón, Anahata, simboliza el equilibrio, la curación y la compasión. Una esterilla de yoga verde te ayuda a reabrir la caja torácica, respirar más profundamente y encontrar una suave estabilidad. Es perfecta para prácticas de reequilibrio, transiciones vitales o para cualquiera que busque la paz interior.
El violeta es el color de la elevación, la conexión espiritual y la intuición. Asociado al chakra coronal, Sahasrara, se abre a una conciencia más amplia y fina. Practicar sobre una esterilla violeta o índigo es entrar en una atmósfera de meditación, donde los gestos se convierten en rituales y la respiración en un canto silencioso. Estas esterillas son una invitación a lo sagrado, a la sutil alineación entre el cielo y la tierra.
Las esterillas de yoga en colores fríos son ideales para los momentos de vuelta a uno mismo, las prácticas nocturnas, las fases de sanación o las exploraciones meditativas. Son una llamada a la fluidez, a la paz interior, a escuchar lo que se dice en silencio.

TONOS NEUTROS: EL CAMINO HACIA LA PUREZA Y EL EQUILIBRIO INTERIOR
En el mundo del yoga, los colores neutros tienen un aura especial. Ni estimulantes como los colores cálidos, ni calmantes como los fríos, encarnan un retorno a lo esencial, una sobriedad que deja espacio a la intención, la respiración y la presencia. Optar por una esterilla de yoga negra, blanca, beige o gris significa elegir un soporte silencioso y minimalista que acompaña discreta pero poderosamente cada etapa del viaje interior.
El negro, a menudo asociado a la estabilidad, el misterio y la profundidad, se convierte en un color de anclaje en el yoga. Practicar sobre una esterilla negra significa echar raíces, volver al cuerpo, poner límites. También es afirmar una elegancia sobria y atemporal. En ciertas tradiciones orientales, el negro simboliza el vacío fértil, el espacio de transformación, el paso entre dos mundos. Se adapta perfectamente a quienes buscan profundizar en su práctica, en una búsqueda silenciosa de la maestría y la concentración.
En cambio, el blanco encarna la luz, la claridad y la pureza. Es el color del kundalini yoga, la meditación y el despertar espiritual. Una esterilla de yoga blanca o crema crea una atmósfera de calma luminosa, casi sagrada. Te invita a reconectar con tu luz interior, purificar tu mente y elevar tu energía. Utilizada para las prácticas matinales, la respiración o los rituales lunares, refuerza la intención de empezar el día en paz.
Gris y beige, estos colores suaves, sutiles, intermedios, crean un ambiente neutro, propicio a la concentración. Una alfombra gris claro calma la vista y centra la atención. El beige recuerda a la tierra seca, la arena y los materiales naturales. Estos tonos van bien con una estética zen, despejada y minimalista, y responden a la necesidad de sobriedad contemporánea. Se adaptan a todos los estilos de yoga, desde el más dinámico hasta el más meditativo.
En un mundo saturado de estímulos, las esterillas de yoga neutras son como islas de silencio. Nos recuerdan que practicar no consiste en añadir, sino en eliminar el desorden, para poder volver al corazón palpitante del momento presente.

CÓMO ALINEAR LOS CHAKRAS, LAS INTENCIONES Y LOS COLORES DE LA ESTERILLA DE YOGA PARA UNA PRÁCTICA MÁS CONSCIENTE
Elegir una esterilla de yoga no es sólo una cuestión de comodidad o agarre.
También es una puerta de entrada a una práctica más consciente, más en sintonía con nuestras intenciones interiores y las energías sutiles del cuerpo. Durante siglos, el yoga ha enseñado que el cuerpo humano está atravesado por siete centros energéticos principales, los chakras, cada uno vinculado a una frecuencia, un color, un plano emocional y una cualidad de la conciencia.
Al conectar con el simbolismo de los colores, es posible reforzar esta sutil alineación entre la postura, la respiración y el viaje interior. Elegir una esterilla de color rojo intenso, por ejemplo, invita al anclaje, la seguridad y la estabilidad del chakra raíz, perfecto para prácticas dinámicas o periodos de estrés. El amarillo solar, por su parte, estimula la confianza, la fuerza de voluntad y el fuego del plexo solar, ideal para flujos tónicos o fases de toma de decisiones. El verde suave, el color del chakra del corazón, evoca la dulzura, el amor y la curación, una elección natural para las prácticas lentas o regenerativas. Muchos practicantes también eligen su esterilla en función de una necesidad del momento: reforzar la comunicación con un azul claro (garganta), alimentar la intuición con un índigo profundo (tercer ojo) o elevar su vibración con un violeta o un blanco (chakra de la coronilla).
Esta correspondencia cromática no es una regla fija, sino un lenguaje intuitivo entre el cuerpo, la mente y el objeto que sustenta la práctica. La esterilla se convierte entonces en mucho más que un accesorio: se convierte en un espejo de la intención, en un aliado energético. Este enfoque da lugar a una práctica consciente, en la que cada color es portador de una vibración, cada sesión se convierte en un ritual y cada postura forma parte de un proceso de transformación interior.

EL PODER EMOCIONAL DE LOS COLORES: ¿QUÉ TIENE QUE DECIR LA CROMOTERAPIA SOBRE EL YOGA?
La cromoterapia, o terapia del color, se basa en una idea sencilla: cada color emite una vibración capaz de influir en nuestro estado emocional, nuestros niveles de energía e incluso nuestra salud física.
Aplicado al yoga, este enfoque ofrece una dimensión más sutil a la práctica: puedeamplificar una intención,equilibrar un estado o acompañar una transformación interior. Algunos colores estimulan, otros calman, reenfocan o abren nuevas percepciones.
El azul, por ejemplo, es famoso por sus propiedades calmantes. Incorporado a una esterilla de yoga, se convierte en una opción ideal para prácticas meditativas, sesiones nocturnas o momentos de recogimiento.
El rosa, suave y envolvente, evoca la ternura y la bondad hacia uno mismo, y se asocia de forma natural con las posturas del corazón o los flujos suaves matutinos.
El violeta es más espiritual, invita a la introspección y a la conexión con uno mismo. Para sesiones de yin yoga, prácticas lunares o meditación profunda, crea un espacio sagrado y silencioso.
Por otro lado, el amarillo o elnaranja despiertan la vitalidad, estimulan la creatividad y las ganas de vivir - perfectos para un vinyasa dinámico o una recuperación tras un periodo de fatiga.
El color de tu alfombra se convierte así en un mensaje que te envías a ti mismo cada vez que vuelves a ella. Actúa como una frecuencia silenciosa, un sutil apoyo energético.
Por eso, marcas como Yogaterrae ofrecen gamas en las que los tonos nunca se eligen al azar, sino que se diseñan para satisfacer una necesidad emocional además de un deseo estético.
Al integrar el simbolismo del color en tu práctica, entablas un diálogo sensible entre tu espacio interior y el mundo visual que te rodea, un diálogo relajante, esclarecedor y profundamente transformador.
Gracias TINA por este post
Gracias por explorar con nosotros el simbolismo de los colores en la práctica del yoga. Que cada esterilla que desenrolles sea más que un soporte: un espejo de tus emociones, una puerta a tu equilibrio interior y un vibrante tributo a tu energía del momento.
Biografía de TINA
-
TINA
1994, Isla Reunión y Mauricio, una vida inspirada en el océano Índico y el yoga
Desde su infancia, esta intrépida viajera ha recorrido el planeta dejando sus huellas en las playas de todo el mundo.Apasionada del surf, el submarinismo y la vela, ha hecho del océano su patio de recreo y fuente de inspiración.
La libertad de las olas, la serenidad de las profundidades oceánicas y el viento a su espalda han jalonado su carrera, guiada siempre por la búsqueda de la conexión con la naturaleza.
A través de sus exploraciones, el yoga se convirtió para ella en algo más que una práctica: se convirtió en una forma de vida.
Entre sesiones matinales de surf y atardeceres meditativos, ha encontrado en el yoga el equilibrio perfecto entre fuerza, fluidez y autoconciencia.
Hoy en día, combina su pasión por los deportes acuáticos con la enseñanza del yoga y forma parte del equipo de Yogaterrae, aquí en Francia, en el suroeste y a menudo a distancia :)
Esta aventurera es una verdadera fuente de inspiración para cualquiera que aspire a vivir en armonía con su cuerpo y la naturaleza.
A través de sus relatos de experiencias increíbles, invita a todos a abrirse a un mundo en el que cada ola, cada respiración y cada postura son una celebración de la vida.