YOGA Y LOS CICLOS DE LA NATURALEZA : ADAPTAR TU PRÁCTICA A LAS ESTACIONES Y A LA LUNA

Noviembre y diciembre, con sus energías otoñales y lunares, nos invitan a bajar el ritmo, volver a centrarnos y adaptar nuestra práctica de yoga a los ciclos naturales.

Este artículo explora prácticas sencillas y profundas para armonizar el cuerpo, la mente y la naturaleza en este momento de transición, desde el Yin Yoga para cultivar el desprendimiento, las meditaciones de luna llena para liberar emociones y los rituales de luna nueva para establecer intenciones.

Escrito por Valentine - Diciembre 2024

Contenidos reducibles

Tiempo de lectura

Aproximadamente 10 minutos

LO QUE ESTÁ A PUNTO DE DESCUBRIR

  • Comprender la influencia de los ciclos naturales en el cuerpo y la mente: Cómo las estaciones y las fases lunares afectan a nuestras energías físicas y emocionales, y por qué ajustar tu práctica de yoga puede transformar tu bienestar.
  • Yin Yoga para el otoño: Cultivar la calma y dejarse llevar: Descubra posturas y prácticas específicas para acompañar la energía del otoño y ralentizar su ritmo.
  • Rituales de Luna Llena: Libera y Gratifica: Meditaciones y ejercicios para conectar con las energías de la luna y liberar lo que ya no te sirve.
  • Luna Nueva y Renovación: Estableciendo Intenciones Alineadas: Cómo utilizar esta fase lunar para reenfocar tus prioridades e integrar prácticas restaurativas.
  • Adaptar su Yoga al ritmo otoñal: Consejos para armonizar su práctica diaria con las necesidades de la estación, de la mañana a la noche.
  • Equilibra tus emociones con la naturaleza: Herramientas para calmar la melancolía otoñal y alimentar tu enraizamiento interior a través del yoga.

  • "¡Vamos a echar un vistazo!

NOVIEMBRE-DICIEMBRE, TIEMPO DE TRANSICIÓN NATURAL E INTERIOR

En noviembre-diciembre, la naturaleza inicia una profunda desaceleración. Los árboles se desnudan, los días se acortan y el aire fresco nos invita al recogimiento. Este mes de transición nos anima a volvernos hacia dentro y ajustar no sólo nuestras prácticas físicas, sino también nuestro ritmo diario.

En un mundo en el que se valora la velocidad, ralentizar el ritmo puede considerarse un lujo, pero en realidad es una necesidad vital. El yoga, con su capacidad para reconectar cuerpo ymente, nos invita a honrar esta desaceleración y a acoger este periodo como una oportunidad para reflexionar y volver a centrarnos.

En la vida cotidiana, esto podría significar replantearnos nuestras mañanas. En lugar de correr nada más levantarnos, ¿por qué no empezar el día con una práctica suave, como la respiración consciente, o un movimiento sencillo, como desenrollar gradualmente la columna vertebral en posición sentada? Estos momentos, por breves que sean, nos permiten fijar una intención para el día.

Del mismo modo, terminar la noche con una meditación o una postura relajante, como piernas contra la pared(Viparita Karani), puede ayudarnos a liberar la tensión acumulada.

Incorporar estos pequeños rituales a tu rutina diaria te ayudará a sentir una profunda sensación de calma a pesar del ajetreo de la vida moderna.

OTOÑO Y YIN YOGA: DEJAR IR Y PROFUNDIZAR

El otoño es una estación en la quela energía comienza a retirarse, en armonía con la naturaleza, que ralentiza su ciclo.

En yoga, el Yin Yoga es una práctica ideal para acompañar este periodo. Al invitarnos a permanecer en posturas durante varios minutos, actúa no sólo a nivel físico, al estirar tejidos profundos como las fascias, sino también a nivel mental, al desarrollar la paciencia y laaceptación. Es una práctica que nos enseña a "ser" más que a "hacer", un antídoto perfecto contra el estrés de la vida cotidiana.

Imagina una tarde de noviembre o principios de diciembre en la que enciendes una vela, desenrollas la esterilla y te colocas en la postura de la oruga(Paschimottanasana). Mientras la espalda se estira suavemente y la respiración se ralentiza, empiezas a sentir que las tensiones del día desaparecen. Este tipo de práctica también permite trabajar las emociones profundas, ya queel otoño suele ser una estación en la que afloran recuerdos y sentimientos reprimidos.

¿Por qué no crear una rutina semanal en torno al Yin Yoga, incorporando posturas como la media paloma o la mariposa? Podría convertirse en un ritual de sanación personal, un momento para reconectar contigo mismo mientras honras laenergía del otoño.

En la vida cotidiana, integrar elespíritu del Yin Yoga también significa aceptar ir más despacio en otros ámbitos. Esto puede adoptar la forma de pausas conscientes en tu día a día, en las que simplemente te tomas unos minutos para respirar u observar la naturaleza.

También debes concederte momentos de desconexión limitando el uso de pantallas por la noche, para permitir que tu mente encuentre un auténtico descanso.

EL PODER INTROSPECTIVO DE LAS MEDITACIONES DE LUNA LLENA

Los ciclos lunares influyen sutilmente en nuestras energías, y la luna llena suele ser un momento en el que nuestras emociones alcanzan su punto álgido. La luna llena de noviembre, conocida como Luna del Castor, simboliza la preparación y laorganización para elinvierno.

En yoga, este es un buen momento para practicar meditaciones introspectivas basadas en el dejar ir y la gratitud. Estas prácticas pueden ser especialmente poderosas si se acompañan de un ritual lunar que marque la importancia de esta fase.

Imagínate bajo la suave luz de la luna, sobre una esterilla o simplemente en un lugar tranquilo de tu casa. Empieza con una meditación guiada, respirando profundamente y visualizando una luz relajante que te envuelve. Al espirar, imagina que te liberas de pensamientos y tensiones innecesarios.

Después de meditar, coge un cuaderno y escribe tres cosas por las que te sientas agradecido. Esta práctica puede parecer sencilla, pero tiene un profundo impacto en tu estado de ánimo. Te ayuda a reconocer las bendiciones de tu vida y a liberarte de lo que ya no te sirve.

En la vida cotidiana, esta conexión con la Luna también puede significar permitirse escuchar sus necesidades emocionales. Si te sientes sobrecargado, date un respiro o haz algo que te nutra, como un paseo por la naturaleza o un baño relajante.

Los ciclos lunares nos recuerdan que todo en la vida está en flujo, y aprender a adaptarse a estas variaciones puede transformar nuestra relación con el estrés y elequilibrio.

LAS LUNAS NUEVAS: TIEMPO DE RENOVACIÓN E INTENCIÓN

A diferencia de la luna llena, que es un momento de culminación, la luna nueva marca un tiempo de vacío fértil y de renovación.

Es un momento en el que podemos plantar intenciones para las semanas venideras, y en el que laenergía invita a la calma y a la reflexión.

En yoga, esta fase lunar es ideal para integrar prácticas suaves e introspectivas que favorezcan el centrado.

Un ritual de luna nueva puede comenzar con una postura reparadora, como Supta Baddha Konasana (postura de la diosa reclinada). Esta postura abre el corazón y la pelvis, simbolizando laacogida y la receptividad.

A continuación, puedes seguir con un pranayama suave, como la respiración alterna(Nadi Shodhana), para equilibrar las energías.

Por último, tómate unos momentos para reflexionar sobre tus aspiraciones: ¿qué quieres cultivar en tu vida? Anota tus pensamientos en un cuaderno dedicado a estos momentos lunares, así podrás ver cómo progresas a lo largo de los meses.

DICIEMBRE: NUEVA TRANSICIÓN Y PRÓXIMAS REFLEXIONES

Mientras que noviembre nos invita a bajar el ritmo y volver a centrarnos, diciembre se perfila como un punto de inflexión, tanto reflexivo como de cara a un nuevo ciclo.

Este mes, a menudo marcado por las festividades y la celebración de fin de año, nos ofrece la oportunidad de contemplar lo lejos que hemos llegado mientras sembramos las semillas de las intenciones para el año venidero. También es un momento en el que el yoga puede desempeñar un papel crucial para mantener nuestro equilibrio interior frente a la agitación exterior.

Diciembre plantea preguntas: ¿cómo podemos acoger esta transición con serenidad? ¿Qué prácticas pueden ayudarnos a mantener los pies en la tierra mientras nos preparamos para una renovación energética en enero?

Este mes es una invitación a explorar rituales que cultiven tanto la gratitud por el año pasado como laapertura a nuevas perspectivas. A través del yoga, la meditación y las prácticas vinculadas a la luz invernal, diciembre puede convertirse en un mes deequilibrio ydespertar, continuando el vínculo entre nuestra práctica y los ciclos naturales.

Gracias por este post tan actual.

MENTE SANA, VIDA SANA

  • VALENTINE

    1994, Isla Reunión, Mauricio, una vida de océano Índico y yoga

    Desde su infancia, esta intrépida viajera ha recorrido el planeta dejando sus huellas en las playas de todo el mundo.

    Apasionada del surf, el submarinismo y la vela, ha hecho del océano su patio de recreo y fuente de inspiración.

    La libertad de las olas, la serenidad de las profundidades oceánicas y el viento a su espalda han jalonado su carrera, guiada siempre por la búsqueda de la conexión con la naturaleza.

    A través de sus exploraciones, el yoga se convirtió para ella en algo más que una práctica: se convirtió en una forma de vida.

    Entre sesiones matinales de surf y atardeceres meditativos, ha encontrado en el yoga el equilibrio perfecto entre fuerza, fluidez y autoconciencia.

    Hoy en día, combina su pasión por los deportes acuáticos con la enseñanza del yoga y forma parte del equipo de Yogaterrae, aquí en Francia, en el suroeste y a menudo a distancia :)

    Esta aventurera es una verdadera fuente de inspiración para cualquiera que aspire a vivir en armonía con su cuerpo y la naturaleza.

    A través de sus relatos de experiencias increíbles, invita a todos a abrirse a un mundo en el que cada ola, cada respiración y cada postura son una celebración de la vida.

VOLVER AL BLOG

Deja un comentario

Tenga en cuenta que los comentarios deben ser aprobados antes de ser publicados.

MENTE SANA, VIDA SANA

NAMASTE